La Postura, Movimientos, Posición de la cabeza, curvatura de la espalda y tiempo de trabajo son los factores clave.
1) ¿Cual es nuestra postura habitual? Si trabajamos sentados y frente a un ordenador, debemos elegir una silla de oficina que nos permita ajustar correctamente la altura del asiento, de modo que nuestros pies estén perfectamente apoyados en el suelo y las piernas formen un ángulo de 90º respecto al asiento. Ademas Tenemos que sentarnos apoyando bien la espalda y asegurándonos de que la columna vertebral esté bien recta.
2) Movimiento en el puesto de trabajo. Si en nuestro puesto de trabajo en la oficina es necesario tener movimientos habituales y repetitivos. Eso implica que nuestra silla de oficina deberá incorporar mecanismos y posibilidad de adaptaciones a diferentes posturas.
3) La posición de la cabeza. Si la tenemos levantada, es decir, como atención al público, necesitamos una silla de oficina que incorpore cabecero o en su defecto respaldo alto. Si la postura es hacia el ordenador, con un respaldo bajo será suficiente. En este caso la silla de oficina elegida, deberá de poder regular el grado de inclinación del respaldo, para situar nuestra silla de oficina ligeramente hacia adelante
4) La curvatura natural de la espalda. En función de la misma, precisamos elegir una silla de oficina que permita la regulación lumbar o en su defecto un mecanismo sincronizado de movimientos del respaldo y del asiento.
5) Tiempo de permanencia sentado. Este parámetro nos dará el grado de ergonomía que debe de tener nuestra silla de oficina. Por ejemplo, si vamos a estar sentados de forma ocasional, la silla de oficina puede no requerir demasiados requisitos de ergonomía. Si por el contrario tenemos que permanecer sentados varias horas en nuestro puesto de trabajo, implica que nuestra silla de oficina ha de cumplir varios requisitos que nos ayudarán a mejorar nuestra calidad en el trabajo y nuestra calidad de vida, cuidando de nuestra espalda.
Conclusiones:
1) La silla de oficina no es igual para todos los puestos de trabajo.
2) La silla de oficina debe de ser adaptable en función de la antropometría (medidas, altura y peso) del usuario.
3) La silla de oficina no sólo es un elemento decorativo o de diseño, es una herramienta.
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